Glorias de Industriales llegan a Miami

Y finalmente, pasándole por encima a los obstáculos y los desencuentros, 10 glorias de Industriales desembarcaron este domingo en Miami para hacer historia.

Vestidos con el tradicional uniforme azul, el grupo llegó al Aeropuerto Internacional de Miami poco después de las 10:30 p.m. y tras los trámites de rigor se fundieron en abrazos y demostraciones de afecto con un centenar de personas que aguardaba por ellos en una sala de la terminal aérea.

Fue una jornada de emociones a flor de piel. El bullicio del viejo estadio Latinoamericano en el recuerdo, los grandes batazos de Capiró, Marquetti y Medina, los lanzamientos supersónicos de Lázaro Valle, las curvas imbateables de Manolito Hurtado, las espectaculares jugadas del Rey Anglada.   

En el grupo de 10 que viajaron desde La Habana figuran Armando Capiró, Lázaro Vargas, Javier Méndez, Rey Vicente Anglada, Juan Padilla, Pedro Medina, Lázaro Valle, Enrique Díaz, Antonio "Tony" González y Armando Ferreiro. A última hora declinó venir el gran Pedro Chávez, por motivos de salud.

Allí estuvieron para recibirlos René Arocha, Manuel Hurtado y Julio Rojo.

Hora de reencuentros

"Este es un gran reencuentro que va a ser reconfortante para todos, nos lo debíamos desde hace años", dijo Anglada mientras se abrazaba a su hijo, Dyan Rey Anglada, quien reside en Miami desde el pasado año.

Traer a este grupo de veteranos de Industriales es el resultado de un tenaz empeño del empresario Alejandro Cantón, presidente de Somos Cuba.

"Ha sido una experiencia increíble, desde la gente en el vuelo hasta la llegada al aeropuerto", dijo Cantón, quien ha emprendido la batalla por rescatar el proyecto a pesar de suspenderse el contrato para usar el estadio de la Universidad Internacional de la Florida (FIU).

La negativa de FIU para facilitar el estadio está siendo investigada por la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU) como una decisión generada por presiones políticas.

Pero mientras se dilucida el conflicto, Cantón tiene prácticamente cerrado el programa, que celebra los 50 años del equipo insignia de la pelota cubana posterior a 1959. El empresario dice que intentará también celebrarlo en La Habana, con participación de jugadores que emigraron o escaparon a Estados Unidos para buscar oportunidades en sus carreras deportivas y en sus vidas.

Los días 23 y 24 de agosto se jugará en Tampa, mientras que el 25 de agosto habrá doble juego en un parque beisbolero del sur de la Florida, que todo indica será el estadio de Homestead.

Cantón piensa cerrar las negociaciones del estadio este lunes. Será difícil que se cierre esa puerta con el antecedente del proceso legal que enfrentó la municipalidad de Homestead por suspender un festival de música cubana, con participación de grupos de la isla, en febrero del 2011.

Pase lo que pase, los Industriales están en Miami. Estos 10 hombres van a dar mucho de qué hablar en lo adelante.

Demasiado Aché

Del aeropuerto de Miami, los visitantes fueron trasladados al Club Aché, en plena Calle Ocho, para una recepción de bienvenida.

Un equipo de AmericaTeVe-Canal 41 de Miami está registrando en imágenes todos los pormenores de este singular reencuentro deportivo, desde los preparativos en Cuba, con vistas a la realización de un documental.

Curioso que el reencuentro y el abrazo con Industriales de todas las épocas, los de aquí y los de allá, despierte controversias y repuntes de rabia en ciertos sectores del exilio. Y es muy curioso también que en Cuba la noticia de la realización de los juegos no se ha publicado en la prensa oficial impresa, y sólo se ha dado a conocer mediante "notas de alarma" en sitios digitales, una de esas notas firmadas por un señor que se llama Reynaldo Taladrid y dirigida a criticar la cacareada "intolerancia del exilio".

Espero que este lunes salga en la prensa cubana que llegaron los Industriales y su actual mánager, Lázaro Vargas, a Miami y fueron recibidos con abrazos antes de irse a celebrar en un sitio situado frente al Restaurante Versailles. ¿Será mucho pedir que se reporte algo así en el Granma o en Radio Rebelde? ¿O es que la concordia no conviene a ninguno de los dos extremos? Yo solo pregunto.

Fuente: CAFE FUERTE