El cubano Alfredo Despaigne Rodríguez se despidió de la Liga Mexicana de Béisbol con average de 338, luego de actuar en 33 partidos en el club Piratas de Campeche.
El cubano Alfredo Despaigne Rodríguez se despidió de la Liga Mexicana
de Béisbol con average de 338, luego de actuar en 33 partidos en el
club Piratas de Campeche, el que fue relegado al séptimo puesto de la
Zona Sur.
Despaigne Rodríguez –quien usó el número 46 en el dorsal en clara
referencia a su ídolo Orestes Kindelán Olivares, máximo jonronero de la
pelota cubana- acumuló 133 veces al bate, ligó 45 imparables (seis
dobles y ocho jonrones) y remolcó 24 carreras.
Además, recibió 27 ponches, cuatro bases por bolas, estafó tres
almohadillas, fue cogido robando en una ocasión, tuvo un por ciento de
embasado de 364, slugging de 564 y 928 OPS.
A la defensa cubrió la paradera derecha -además jugó en el
izquierdo- y cometió un error. Terminó con el tercer mejor average de
los Piratas, a pesar de no acumular la cantidad de comparecencias
necesarias para ser considerado en la listas de los mejores bateadores
de la campaña.
El slugger caribeño consolidó su actuación con un repunte ofensivo en
las últimas tres subseries, en las que conectó 14 imparables en 30
veces al bate, para un promedio parcial de 466; aunque no pudo concluir
con la cifra de 10 cuadrangulares, objetivo que se había propuesto en
esta recta final.
Despaigne Rodríguez vivió su momento cumbre en en el béisbol
profesional cuando, el 3 de julio, bateó de 6-6 e igualó un añejo récord
de más hits en un partido de la Liga Mexicana de Béisbol (LMB), en
poder del también criollo Martín “El Inmortal” Dihigo y del icono local
Daniel Fernández Méndez.
El granmense debutó de 4-1, el 22 de junio frente a los Vaqueros de
la Laguna, y se despidió este sábado de 4-2 ante Tigres de Quintana
Roo, en ambas ocasiones la nave zozobró.
El criollo fue el único de los tres jugadores de la Isla adquiridos
por los Piratas -además de Michel Enríquez Tamayo y Yordanis Samón
Matamoros- que terminó la temporada, después de un acuerdo histórico con
la Federación Cubana de Béisbol Amateur (FCBA), que marcó el inicio de
la inserción de los peloteros cubanos activos en el béisbol rentado.
Fuente: CUBASI
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